El Museo Vasco de Bilbao permitirá contemplar una obra excepcional de gran valor histórico y artístico en su nueva exposición: el majestuoso TRÍPTICO DE ELEJABARRI

La muestra Dohaintzak 2013-2018 Museoa eraikiz. Donaciones 2013-2018 Construyendo Museo está formada por valiosas piezas donadas por particulares y entidades a la institución vizcaína invisibles para la ciudadanía hasta este momento.

La Presidenta del Museo Vasco y Diputada de Euskera y Cultura, Lorea Bilbao, y la Concejala de Cultura del Ayuntamiento de Bilbao, Nekane Alonso, han asistido a la presentación de la nueva exposición.

El tríptico de Elejabarri, procedente de la desaparecida ermita de San Juan “ante Porta Latina” y fechado en 1597, se convierte en una oportunidad única para descubrir esta joya del arte vasco de gran valor histórico y artístico.

La exposición, que nace con el objetivo de poner en valor el más de millar de donaciones recibidas en el último lustro por parte de las y los donantes, y su generosidad, se podrá visitar entre el 8 de noviembre de 2018 y el 24 de febrero de 2019.

El Museo Vasco permitirá contemplar una obra única del arte vasco de gran valor histórico y artístico en la exposición temporal Dohaintzak 2013-2018 Museoa eraikiz. Donaciones 2013-2018 Construyendo Museo que ha inaugurado recientemente. Se trata del Tríptico de Elejabarri, procedente de la desaparecida ermita de San Juan “ante Porta Latina”, situada en la antigua Anteiglesia de Abando, en el barrio de Elejaberri, en Basurto, y fechada en el año 1597. Junto a esta pieza, numerosas donaciones de gran valor que la institución vizcaína ha recibido entre los años 2013 y 2018.

Así, la exposición, cuyo hilo conductor son los cambios generados por la revolución industrial en la sociedad vasca y, en particular, vizcaína durante el periodo de entre siglos XIX-XX, está articulada en dos salas. La primera, dedicada al universo femenino,  sorprenderá con diplomas y labores de mano, vestidos de novia y cunas como la utilizada por la fotógrafa Eulalia Abaitua para mecer los sueños de su descendencia. Trajes y complementos a la última moda diseñados por las couturières parisinas y el gabinete privado que Rosario Lecea, esposa del arquitecto Ricardo Bastida, tenía en su domicilio familiar. El segundo espacio, dedicado a las transformaciones sociales y económicas generadas en el territorio, está representado por una  figura, la del magnate y político Horacio Echevarrieta; una nueva técnica y arte, la fotografía que, practicada por las nuevas elites burguesas, servirá de documento y testimonio del pasado. Y un lugar, la Anteiglesia de Begoña, en el que confluyen el progreso, representado por la empresa siderúrgica S.A. Echevarria, y la tradición, con la recreación de un chacolí de temporada.

En la presentación de la exposición, que se podrádisfrutar entre el 8 de noviembre de 2018 y el 24 de febrero de 2019, han estado presentes Lorea Bilbao, Presidenta del Museo, y Diputada de Euskera y Cultura, Nekane Alonso, Concejala de Cultura del Ayuntamiento de Bilbao, y Sorkunde Aiarza, Coordinadora de la institución.

Desde los orígenes del Museo Vasco, hace casi 100 años, las donaciones han sido una de las principales vías de incremento de su colección, convirtiéndose en casi la mitad del fondo patrimonial ingresado. En los últimos cinco años, esas piezas han aumentado su porcentaje notablemente, alcanzando cifras cercanas al 90% del total de las adquisiciones. Muchos de esos objetos han estado custodiados en las reservas del Museo Vasco, invisibles a la ciudadanía hasta este momento, ya que no han formado parte antes de la exposición permanente de la institución.

Por todo esto, uno de los objetivos de la muestra Dohaintzak 2013-2018 Museoa eraikiz. Donaciones 2013-2018 Construyendo Museo es poner en valor el más de millar de donaciones recibidas en el último lustro. Aportaciones realizadas por particulares y entidades de la sociedad a la que pertenece y representa el Museo Vasco y con las que ha evolucionado la institución en estos casi 100 años de trayectoria gracias a su generosidad. Además, la muestra quiere romper con la percepción de que toda la colección custodiada por el Museo se ciñe únicamente a la cultura tradicional.

La nueva exposición del Museo Vasco se reparte en dos salas y cuenta con una selección de los elementos recibidos durante estos años. Todos ellos siguen una trama sugerida por los cambios generados por la Revolución Industrial en la sociedad vasca y, en concreto, vizcaína durante el periodo comprendido entre los siglos XIX y XX. Únicamente se han utilizado, al mirar al pasado, vestigios materiales de la emergente sociedad burguesa del periodo como espejo de la modernidad y las nuevas formas de vida urbana, base de la actual en la que aún hoy nos desenvolvemos.

Si los objetos, imágenes y documentos donados son fundamentales, igual de importantes son las personas que han realizado y aportado su testimonio. Vivencias que han ayudado a tejer la memoria individual y colectiva de los que fuimos y lo que somos. Todas esas aportaciones generan un corpus documental inmaterial que subyace en el discurso expositivo y da significado al patrimonio material a transmitir.

En cuanto a esa parte material e inmaterial, la muestra está formada por piezas de gran valor económico en algunos casos, de intenso valor cultural y emocional otras, y de indudable valor testimonial todas ellas. La muestra habla de un choque entre pasado y presente de una institución que está en continua evolución y construcción gracias, en parte, a estas donaciones. Un espacio para el conocimiento, la reflexión y el intercambio cultural.

Tríptico de San Juan de Elejabarri 

El Museo recibió en donación un tríptico policromado procedente de la desaparecida ermita de San Juan “ante Porta Latina”, situada en la antigua Anteiglesia de Abando, en el barrio de Elejaberri, en Basurto.

La tabla central representa la Crucifixión y las laterales, fechadas en el año 1597, los retratos de Pedro de Novia y Castillo y Marina Usso de Uribarri, casados en 1551 y fundadores del Vínculo y Mayorazgo de Novia según escritura otorgada en Bilbao ante el escribano Lope García de Meñaca el 29 de mayo de 1590.

El linaje de Novia tiene sus raíces en la Torre de Novia, a la que se asociaba la ermita. La torre desapareció en el siglo XVII y la ermita se mantuvo en pie hasta aproximadamente el año 1944. En el siglo XVIII, tras la desaparición de la torre original, la familia construyó un palacete con una amplia finca en los terrenos que ya en el siglo XX ocupó la Feria de Muestras.

El fundador de mayorazgo, el retratado Pedro de Novia y Castillo, a pesar de tener su solar en Basurto, se trasladó a vivir a la Villa de Bilbao, a la casa-torre familiar de la calle Barrencalle Barrena esquina Ribera (quemada en la I Guerra Carlista) lo que le permitió participar activamente en la vida política bilbaina: fue Alcalde de la villa en 1577, Regidor en 1583, magistrado del Consulado en repetidas ocasiones, Diputado en 1565, 1569, 1571, 1575 y 1592 y Fiel en 1572 y 1594.

En el año 1621 una de sus nietas, Ana María de Novia y Avendaño, casó con Juan de Salzedo Aranguren y Achuriaga, dando origen al linaje de Novia de Salcedo, al que pertenecieron significados personajes de la vida e historia de Bilbao y Bizkaia, entre los que cabe destacar a Pedro de Novia de Salcedo y Castaños.

Otras piezas de la exposición

Junto al Tríptico de Elejabarri, la exposición contará con piezas tan especiales como los bordados de temática religiosa realizados por niñas en edad escolar para aprendizaje de las labores de aguja, datados en la segunda mitad del siglo XIX. Trajes de novia, abanicos y sombrillas, vestidos de fiesta de los años treinta, álbumes fotográficos familiares, una linterna mágica, o el busto del empresario y político Horacio Echevarrieta Maruri, modelado por Valentín Dueñas en 1921 en los talleres Mir y Ferrero.

La muestra Dohaintzak 2013-2018 Museoa eraikiz. Donaciones 2013-2018 Construyendo Museo está dedicada, en definitiva, a las mujeres y hombres que con sus donaciones al Museo Vasco generan patrimonio y enriquecen las colecciones, construyendo así museo. Gracias a estas personas nuestro paso por la historia quedará grabado en el futuro. Por otra parte, está centrada en la ciudadanía, ya que gracias a la exposición podrá descubrir objetos nunca antes expuestos, auténticos tesoros de nuestra cultura que ahora se muestran al Mundo.